por Anabel
Para los que somos amantes de los dramas, durante tres meses hemos visto a través del drama Bridal Mask la historia real de Corea bajo el régimen japones desde 1910-1945. Pudimos observar en unos de sus episodios como chicas jovenes eran "contratadas" para trabajar como "enfermeras". Aquí comparto con ustedes la realidad de esta triste y vergonzosa acción por parte del Japón que hasta el día de hoy sigue siendo motivo de debate internacional.
JUSTICIA PARA LAS "MUJERES DE COMFORT"
Durante la segunda guerra mundial hacia 1932 hasta el final de la II Guerra Mundial. El gobierno japonés obligó a servir como esclavas del ejército a miles de mujeres coreanas, se calcula que a unas 200.000 mujeres (algunas contaban solamente 12 años). Se le llamó “esclavitud sexual militar”. Las mujeres eran secuestradas, golpeadas y obligadas a prestar servicios sexuales a los militares. Las graves agresiones sexuales a que fueron sometidas y la muerte de la mayoría de ellas, debían considerarse un crimen contra la humanidad.
En muchos casos se las engañaba con la promesa de trabajo en fábricas o restaurantes y, una vez reclutadas, las mujeres eran encarceladas en "estaciones de confort" en países extranjeros. Otras mujeres fueron detenidas a punta de pistola, y algunas, después de ser violadas fueron llevadas a "estaciones de confort".Ha sido documentado que los mismos militares japoneses reclutaban mujeres a la fuerza. Algunas "estaciones de confort" fueron administradas de forma privada, supervisadas, o administradas, directamente por el Ejército Japonés.
CONDICIONES EN LAS RESIDENCIAS DE COMFORT
Según el testimonio de una antigua "mujer de solaz", las condiciones en las que normalmente prestaban sus servicios a los soldados del ejército japonés eran casi siempre atroces. La calidad de su alojamiento y el trato general variaban de un lugar a otro, pero casi todas las víctimas hablan de la dureza y crueldad de sus circunstancias. Las propias residencias, según su situación, eran en unos casos edificios conquistados por el ejército japonés en su avance o, en otros, barracones provisionales montados por el ejército específicamente con la finalidad de alojar a "mujeres de solaz". En el frente, las residencias solían ser tiendas o casetas provisionales de madera.
El ejército proporcionaba alimentos y vestido, aunque algunas antiguas "mujeres de solaz" se quejan de haber recibido escasa alimentación durante largos períodos. Aunque en la mayoría de los casos se suponía que las mujeres eran retribuidas por sus "servicios" y recibían vales en lugar del dinero que se les debía, sólo muy pocas tuvieron algún "beneficio" al final de la guerra. Así, después de la retirada del ejército japonés, no pudieron tener ni siquiera el pequeño consuelo de haber quizás ahorrado lo suficiente para ayudarse a sí mismas o a sus familias.
Compartiremos algunos testimonios que brindaron años atrás algunas de estas victimas:
Kum Ju Hwang
Pensé que me habían contratado de bracera cuando, teniendo yo 17 años, la esposa japonesa del jefe de la aldea ordenó a todas las chicas coreanas solteras que fueran a trabajar a una fábrica del ejército japonés. Trabajé allí tres años, hasta el día que me pidieron que me fuese con un soldado japonés a su tienda. Me dijo que me desnudara. Me resistí porque tenía mucho miedo y todavía era virgen. Pero me arrancó la falda y me cortó la ropa interior con un fusil con la bayoneta calada. Entonces me desmayé. Cuando volví en mí estaba cubierta con una manta pero había sangre por todas partes.
Me dí cuenta de que, durante el primer año, como a todas las demás chicas coreanas que estaban conmigo, me ordenaron que sirviera a oficiales de alto rango y, cuando el tiempo pasó, como ya nos habían "usado" tanto, tuvimos que servir a oficiales de rango inferior. Cuando una mujer contraía una enfermedad, generalmente desaparecía. También nos dieron 606 inyecciones para que no quedásemos embarazadas o para que abortásemos.”
Chong Ok Sun
Chong Ok Sun
"Nací el 28 de diciembre de 1920 en Phabal-Ri, condado de Pungsan, provincia de Hamgyong Meridional, al norte de la península de Corea.
Un día de junio, cuando tenía 13 años, tenía que preparar el almuerzo para mis padres que trabajaban en los campos y fui hasta el pozo de la aldea a buscar agua. Un soldado de la guarnición japonesa me vio allí y me llevó con él, de manera que mis padres nunca supieron qué había sucedido de mí. Me llevaron en camión hasta la comisaría, donde fui violada por varios policías. Cuando empecé a gritar me pusieron medias en la boca y siguieron violándome. El jefe de la comisaría me golpeó en el ojo izquierdo porque estaba llorando. Ese día perdí la vista del ojo izquierdo.
Después de unos diez días me llevaron al cuartel de la guarnición del ejército japonés en la ciudad de Heysan, donde había unas 400 chicas coreanas; todas teníamos que servir de esclavas sexuales todos los días para más de 5.000 soldados japoneses, es decir, hasta 40 hombres por día. Cada vez que protestaba, me pegaban o me metían trapos en la boca. Uno me ponía un fósforo en los genitales hasta que le obedecía, con lo que toda esa parte del cuerpo me sangraba.
Una chica coreana que estaba con nosotros un día preguntó por qué teníamos que servir a tantos hombres por día, hasta 40. Para castigarla por esa pregunta el comandante Yamamoto de la compañía japonesa ordenó que le pegaran con una espada. En nuestra presencia le quitaron la ropa, la ataron de piernas y de manos y la hicieron rodar sobre una tabla erizada de clavos hasta que los clavos quedaron cubiertos de sangre y trozos de su piel. Al final le cortaron la cabeza. Otro japonés, Yamamoto, nos dijo que era fácil matarnos a todas, más fácil que matar perros. También dijo: "como esas chicas coreanas están llorando porque no han comido, hiervan la carne humana y hágansela comer".
Una chica coreana contrajo una enfermedad venérea por haber sido violada tantas veces y más de 50 soldados japoneses fueron infectados. Para impedir que se propagara la enfermedad y "esterilizar" a la chica, le metieron un hierro candente en los genitales”
En 1991 Kim Hak Soon se convirtió en la primera sobreviviente que
habló públicamente de su terrible experiencia. Ella murió el 16 de
diciembre 1997.
CONTINUAN ESPERANDO JUSTICIA
Las supervivientes son ya ancianas, muchas murieron sin recibir justicia, ni siquiera una disculpa. Algunas de estas mujeres, aun luchan hoy para que se haga justicia.
El gobierno japonés se niega a reconocer oficialmente su responsabilidad a lo que se considera uno de los mayores casos de trata de seres humanos del siglo XX. Sin embargo, existen las suficientes pruebas para inculparle.
Las sobrevivientes seguirán luchando hasta el final.
En agosto 29 de este año, como todos los miércoles desde enero de 1992 un grupo de ex "muejres de comfort" protagonizaron una manifestación frente a la Embajada de Japón. “Yo era una amada hija de una familia en Gyeongju, cuando fue arrastrado hasta el" campo de confort "a los 15 años", dice Gang Il-chul, 85. "Sobreviví allí durante los próximos cuatro años. Los japoneses siguen diciendo que no hay "prueba" de que nos vimos obligados a ser esclavas sexuales. ¿Qué mejor prueba que yo misma?
A pesar de las condiciones climáticas extremadamente frías Gil Won Ok, asiste a cada manifestación del miércoles, celebrada en frende de la Embajada japonesa en Seúl. Gil Won Ok dice " El Gobierno japonés cree que si nosotras las mujeres de comfort morimos, esto será sepultado al olvido.. pero.. siempre y cuando la próxima generación lo sepa, no va a ser olvidado"
Gil Won Ok fue una de las más de 200,000 mujeres que habían sufrido a manos del ejército japones, y continuan sufriendo por la negativa japonesa para hacer frente a sus crímenes de guerra.
Esto me parece algo atroz, denigrante y horrible haber utilizado a las mujeres para este tipo de acciones. Pienso que el gobierno japones debería dar sus disculpas y respetos a estas mujeres, que no estarían haciendo estas protestas todo este tiempo si no fuera verdad lo que dicen, me parece muy triste que halla pasado este tipo de cosas pero se que algún día se hará justicia por todas esas mujeres que sufrieron durante mucho tiempo por el régimen militar japones.
ResponderEliminarComo ha dicho Gil Won Ok, es algo que no debe ser olvidado...
ResponderEliminarEsto en definitiva fue algo que no debió haber sucedido jamas, nadie merece ese tipo de trato y me horroriza saber que le hicieron daño también a jóvenes, había escuchado antes de este tema pero hasta hoy he podido leer con mayor atención como fueron los hechos, me desgarra saber que hayan sufrido de esta forma y que sobre todo, las hayan tratado como si fueran nada...
Lo menos que pueden hacer por ellas es pedirles disculpas y aun así yo creo que merecen aun más...
El gobierno Japones piensa que ignorando esto como si jamas viera pasado todo el mundo a su alrededor pensara de la misma forma y lo dejara en el olvido pero creo que más que nada, deberían pedir estas disculpas para comenzar un nuevo mañana, hacer una diferencia y darle paz no solo a estas luchadoras de la vida también a las personas de su alrededor y cercanos. Eso es lo que creo, Muchas gracias por compartir este articulo...
-Mayra
Ha sido muy triste para mi leer esto, estos testimonios me parecen imposibles de creer por la crudeza de los hechos, pero estas mujeres son la prueba inminente de una terrible masacre. No entra en mi mente el hecho de que el ser humano llegue tan bajo y destruya a otros por puro placer, sólo por saciar sus instintos más bajos.
ResponderEliminarOjalá el gobierno japonés acepte su culpa internacionalmente y les hagan justicia, que si bien, los japoneses de hoy no son los que protagonizaron aquellos hechos, es una culpa que su pueblo ha cargado por décadas y tiene que aceptar.
Estas mujeres han protestado muchísimo y es lo menos que esperan antes de irse a la tumba, pero como ellas dicen: "El Gobierno japonés cree que si nosotras las mujeres de comfort morimos, esto será sepultado al olvido.. pero.. siempre y cuando la próxima generación lo sepa, no va a ser olvidado"
que lastima! nuestra histora humana es tan denigrante!! esto no es solo en corea y con estas señoras que son de admirar porque piden justicia por lo que les ha sucedido! esto pasa en todas las famosas guerras de nuestra historia y sigue pasando hoy en dia! personas que son engañadas con promesas de un buen trabajo que las ayudara a poder darle un apoyo economico a sus familas y al momento de la verdad son llevadas a otros paises a realizar estos trabajos. es cierto no sera tan atroz y inhumano como esto que vivieron estas señoras pero al final tiene el mismo fin!
ResponderEliminarporque sera que la persona siempre buscara poder! y estar por ensima de los demas! ???
espero que japon y sus mandatarios puedan aceptar sus errores pasados y den a estas pobres señoras la disculpa y reconocimiento que tanto quieren!
pobrecitas ojala se les haga justicia tanta maldad.
ResponderEliminarespero que esto no pase de nuevo todo tenemos derecho al respeto!!
Es como dice aqui, el gobierno japones espera que al morir ellas todos olviden las atrocidades que hicieron pero eso no puede quedar así... La justicia humana es un asco pero todo lo que se hace tiene consecuencias. La lucha de estas mujeres no es en vano, de eso estoy segura. Espero pronto el gobierno Japones acepte lo que hicieron y ofrezcan una gran disculpa por todo el daño que hicieron contra estas mujeres.
ResponderEliminarEs increíble por todo lo que pasaron muchas mujeres coreanas. Ahora comprendo varias cosas, deberian de pedir mas que disculpas, eso que hicieron no fue nada agradable, es muy triste ver como esas mujeres inocentes sufrieron para "complacer" a otros. El ser humano es algo increíble, hasta donde pueden llegar!!! Gracias a Dios eso termino, pero aun asi esas marcas de dolor que dejaron jamas las personas lo olvidaran. Esas mujeres son dignas de admirar, por todo lo que pasaron y fueron muy valientes en hablar.
ResponderEliminarGracias por compartir esta historia.. No puedo creer, que Japón a estas alturas todavia se niegue a reconocer su responsabilidad ante estos actos atroces que llevaron a cabo en contra de miles de mujeres coreanas en la segunda guerra Mundial. Es una verguenza que por tantos años estas mujeres han luchado a viva voz para dar a conocer su historia, para confirmar que si sucedió, que ellas fueron victimas, dando sus testimonios, mostrando sus cicatrices, y todavia haya sido imposible para ellas recibir la satisfacción de ver a Japon pedirles disculpas. Espero de corazón pronto leer que estas mujeres, antes de cerrar sus ojos en esta vida, puedan ver que se les hace justicia. Estoy segura que su lucha no ha sido en vano.
ResponderEliminarQue tristeza me ha dado conocer sobre esta situaciíon... estas señoras son valientes, incansables.. tratando de que lo que sufrienron encuentre el reparo moral que merecen. Para que el mundo no olvide este tipo de accion y no se repitan nunca..
ResponderEliminar"Comfort women"... Me resulto muy impactante leer sobre este capitulo de la historia en la 2a Guerra Mundial que pudo involucrar a mujeres de paises no sólo de Corea, sino también de China, Filipinas, Malasia, Birmania, Hong Kong, Macao, Vietnam, Tailandia, Birmania o el propio Japón; pero afectando mayormente a las mujeres de Corea; lei en otros medios que la cifra extra-oficial puede llegar a las 200mil.
ResponderEliminarLei tambien que incluso existen documentales como The Murmuring (1995), Habitual Sadness (1997) y My Own Breathing (2000) donde se documentan las atroces historias. Adicional se hizo una exhibicion de fotos con algunas de las sobrevivientes que tuvieron la valentia de romper el silencio... Mujeres coreana dignas de admirar.
Como otros capitulos controversiales de la historia que lamentablemente ha vivido la humanidad, es mi sincero deseo que estas sobrevivientes (las que han hablado y las que no) y sus familias, se lleven consigo la experiencia de recibir las disculpas evidentes, que aunque nunca borraran las heridas, les puedan dar paz a su corazones.
Lo primero que se vino a mi mente después de leer todo esto fue "PROHIBIDO OLVIDAR" fue algo terrible lo que tuvieron que vivir las mujeres Coreanas, es muy triste leer todos los abusos que sufrieron y eso que sólo fueron un par de testimonios... que otras impactantes y tristes relatos tendrían las otras? Ya veo porque la novela "Bridal Mask" es tan querida en Corea... muestra las injusticias y sufrimientos que tuvieron que pasar los coreanos.. y eso que lo hicieron de una manera "light" para que no se viera tan fuerte. Me parece irresponsable por parte de Japón de no aceptar la culpa.. si como dicen ellas que otra prueba necesitan si estan ellas vivas... las que sufrieron todo eso.. espero y en un futuro no muy lejano Japón tome la responsabilidad de sus actos en el pasado con los Coreanos..
ResponderEliminarEs increible por todo lo que tuvieron que pasar estas mujeres ser sometidas en contra de su voluntas y ser usadas de esa forma, es algo inhumano! espero hagan justicia a estas mujeres y le den lo que es justo! por todo lo que pasaron en su niñez o juventud. Leer estos testimonios es algo que entristrece, ya que estas mujeres toda su vida recordan estos momentos. Son de admirar!, espero sean escuchadas y esto no sea en vano. Gracias por este articulo y compartirlo.
ResponderEliminarSi bien es cierto ya no hay nada que se pueda hacer para borrar lo sucedido, Japón definitivamente debería disculparse, públicamente, y debería dar algún tipo de indemnización o compensación por el sufrimiento de estas mujeres.
ResponderEliminarAhora bien, a pesar de que es muy difícil y duro, Corea no debe dejarse llevar por el rencor. En realidad, los nietos no tienen la culpa de lo que hayan hecho los abuelos. Esta es una de esas situaciones donde hay que saber perdonar; en donde se tiene que comenzar a escribir en una página nueva para que ambas naciones puedan tener relaciones cordiales y puedan seguir creciendo y avanzando.
Sin embargo, tanto como es importante saber perdonar, también es muy importante, si no es que lo es mucho más, saber pedir perdón. Japón tiene que entender que reconocer su error y disculparse por ello, no lo va a hacer menos como nación; por el contrario, le va a dar mucho más prestigio, mucha más grandeza porque no pedir perdón es de cobardes; saber reconocer los errores, disculparse por ello y resarcirse es de VALIENTES Y VERDADEROS HOMBRES.
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ResponderEliminarEs Increíble como el ser humano puede ser tan despiadado y cruel.
ResponderEliminarLes hicieron vivir un infierno, que triste que Japón no sean capaz de reconocer lo que hicieron en su pasado, ahí puede estar una vez más la respuesta de tantos desastres que viven actualmente y siemrpe
Debe ser horrible vivir con esos recuerdos, definitivamente que si esos hombres ya no están vivos, es super probable que no estén precisamente en el reino de Dios
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ResponderEliminarHola hola, muchas gracias por la entrada. Es lamentable la situación de estas mujeres. Cosas como estas merecen ser divulgadas para que no se olviden y para que sean mas voces las que se unan a su clamor.
ResponderEliminarPor otra parte me gustaría que se incluyera en esta entrada que medidas han tomado los Gobiernos de Corea del Sur y del Norte (por que tengo entendido que para aquellas épocas eran un solo país) para apoyar la causa de estas mujeres que es completamente justa.
Cabe destacar que no solo las mujeres coreanas fueron usadas como "mujeres de confort" sino que también de otras regiones del mundo como China, Filipinas y otros, incluyendo de su propio país (Japón). Lamentablemente solo quedan unas cuantas mujeres testigos de este oscuro episodio en la historia.
Saludos :)
Esas mujeres son el vivo testimonio de cómo la mujer era vista como un ser inferior, enfocada en solo proporcionar confort, olvidandose de sus propias necesidades. Siempre teniendo que estar dispuesta a satisfacer los deseos del hombre...Sus testimonios son bastante claros y reveladores, la crueldad a la que fueron sometidas debió dejarles muchas cicatrices tanto mentales, como físicas. Debió ser horrible estar con hemorragias, cortadas, golpes y moretones, terminar la jornada de un día sumamente heridas y agotadas teniendo como unico consuelo el saber que pudieron permanecer un día mas con vida pero con mucho terror sabiendo que en pocas horas...seria un nuevo dia y comenzaria una nueva jornada llena maltratos.
ResponderEliminarLa verdad no comprendo como se puede demigrar a el ser que te trae al mundo pues cada uno de esos hombres vino de una mujer y estoy segura que ninguno le hubiera gustado ver a sus madres de y en esa forma...como un objeto, una poseción con tiempo limitado de vida útil que puede ser botado al fin del mismo.
Es imposible leer estos relatos sin sentirse estremecido por lo triste y cruel de las experiencias que estas mujeres vivieron, sometidas a tratos inhumanos, fueron explotadas como si fueran objetos, despreciadas y abusadas. Supongo que cada uno de esos días fue como un infierno para ellas. El abuso sexual es uno de los peores tratos que se le puede dar a una persona, no solo es el daño físico sino el psicológico, son hechos que quedan grabados en la memoria. Dios sabe lo mucho que sufrieron estas mujeres y él es el único que puede dignifícarlas, como hizo con María Magdalena, espero que estas señoras puedan recibir una sincera disculpa y sean reconocidas por parte de los descendientes de sus captores y verdugos. No solo por lo que sufrieron sino porque merecen ser vistas como un ejemplo de valentía, porque no desfallecieron y siguieron adelante sus vidas a pesar de su difícil pasado. Al ver los rostros en las fotos de estas abuelas yo veo dignidad, inocencia y pureza eso jamás pudieron arrebatarlo.
ResponderEliminarEs una triste historia que cosas tan atroces hayan ocurrido en el mundo. El ser humano es tan valioso que nadie nunca debería ser abusado ni maltratado en el mundo. Situaciones como estas hacen que tu corazón se sienta triste y de alguna manera compartir su dolor. Como mujer no puedo explicarme como estas mujeres fueron maltratadas y abusadas cientos de veces solo por el placer de unos hombres sin respeto por la dignidad humana. No es de seres humanos el realizar estas acciones tan atroces. Una disculpa no seria suficiente para estas mujeres que han sufrido un gran dolor, pero la justicia divina se encargara de los que cometieron estos crímenes atroces. Como ocurre en nuestro país, olvidar no esta permitido.
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